Cuando Eveline y Silvia visitaron a su madre, conocieron por fin a su nuevo novio. Cuando su madre salió, ellas quisieron saber más de ese apuesto hombre. Después del largo viaje las chicas necesitaban relajarse y sabían cómo hacerlo. ¿Podría el hombre resistirse? ¡Imposible! Dos chicas lamiendo sus bolas, no podía decir que no. Las follaba alternativamente. Al final las cubrió de semen cuando su mujer volvió. ¡Estaba tan furiosa que les arrojaba comida! ¡Qué escándalo!